¿Te apetece una cena rápida y deliciosa? Si es así, no busques más, porque los fritos de pollo son la respuesta a tus deseos culinarios. El crujiente exterior y la suculenta carne del interior de estos fritos son simplemente deliciosos y perfectos para satisfacer tus ansias de frito y pollo al mismo tiempo.
Para preparar estos deliciosos fritos de pollo, sigue estos sencillos pasos:
Corta las pechugas de pollo en trozos pequeños o en tiras largas, según prefieras. Luego, sazona bien el pollo con sal y pimienta negra y resérvalo.
En un recipiente grande, mezcla la harina de trigo, el ajo en polvo, el pimentón dulce y la sal. Asegúrate de mezclar bien todos los ingredientes secos para que los fritos tengan sabor en cada bocado.
En otro recipiente, bate los huevos. En un tercer recipiente, coloca el pan rallado. Asegúrate de que todos tus ingredientes estén preparados antes de comenzar a freír.
Para empezar a empanar el pollo, primero debes cubrirlo en la mezcla de harina de trigo y especias asegurándote de que quede completamente cubierto. Luego, sumerge cada uno en la mezcla de huevo batido y finalmente cúbrela con el pan rallado.
Calienta suficiente aceite en una sartén grande. Una buena manera de asegurarte de que el aceite esté suficientemente caliente es arrojar una pequeña cantidad de pan rallado en la sartén; si burbujea y se dora, el aceite está listo. Fríe el pollo en pequeñas porciones para obtener mejores resultados. Cuando estén dorados por ambos lados, colócalos sobre papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
Para hacer que tus fritos de pollo sean aún más deliciosos, puedes probar agregar unas pizcas de otras especias para darle un sabor diferente, como comino, salsa de soja, mostaza en polvo, o incluso una pizca de cayena para un poco de picante. También, puedes intentar remplazar la harina de trigo por harina de almendras para hacerlo aún más saludable. Otra opción es utilizar una mezcla de pan rallado y panko para obtener una cobertura aún más crujiente.
No te preocupes si necesitas preparar una gran cantidad de fritos de pollo para una reunión o una fiesta. Si no deseas que las preparaciones anteriores te lleven mucho tiempo, una excelente solución es preparar el pollo con anticipación (hasta 24 horas antes de cocinarlos), cubrirlo y refrigerarlo. Cuando estés listo para freírlo, simplemente empana y fríe.
Una vez que tus fritos de pollo estén listos, sírvelos con tus salsas favoritas. La salsa barbacoa, la salsa de queso o la salsa de mostaza son opciones clásicas y deliciosas. Asegúrate de servirlos mientras están calientes para que no pierdan su crocancia.
En resumen, los fritos de pollo son una deliciosa y rápida cena que seguramente satisfará tus ansias de frito y pollo. Con pocos minutos de preparación y unos pocos ingredientes simples, puedes tener una cena deliciosa lista en poco tiempo. Prueba esta receta la próxima vez que estés buscando una opción rápida y fácil para cenar, ¡no te arrepentirás!